La educación que damos a nuestros hijos ya desde muy pequeños es la base fundamental de sus vidasy para que se desarrollen sus valores, gustos, su forma de ver la vida y de afrontarla. Es por esto que desde Alegra Psicólogos Málaga y Puente Genil queremos ayudar a favorecer que vuestros hijos desarrollen sus preferencias de una forma libre y sana desde pequeños, salvando que no se produzca el efecto del sexismo inconsciente.
En muchas familias existe la costumbre de regalar a los niños pequeños unos u otros juguetes dependiendo de su sexo. El ser niño o niña determina, incluso, los colores de la ropa que se les compra.
«La educación que damos a nuestros hijos desde muy pequeños
es la base fundamental para que se desarrollen sus valores»
Este hecho, del que quizás no siempre somos conscientes, encierra un inconveniente: estamos dirigiendo los gustos de nuestros hijos y contribuyendo al peligroso sexismo inconsciente. Les enseñamos que no es normal que los niños tengan muñecas o camisetas rosas, o que las niñas tengan balones, dinosaurios o coches. Ejemplos como estos son los que facilitan que nuestros hijos tengan una concepción rígida de cómo debe ser el mundo y dificulta que sean tolerantes.
Para ello, en Alegra Psicólogos Málaga y Puente Genil os proponemos, como posible opción alternativa (entre otras), regalar a vuestros hijos o sobrinos pequeños objetos más neutrales (que no se consideren “de niño” o “de niña”) que estimulen sus capacidades, tales como puzles, libros, juegos de mesa, de creatividad o juegos educativos en general. De esta manera no estaremos cerrando el círculo de sus preferencias y podrán desarrollar un pensamiento flexible y tolerante hacia sí mismos y su entorno.
«Os proponemos regalar a vuestros hijos o sobrinos pequeños,
objetos más neutrales, que estimulen sus capacidades»
Con estas recomendaciones no queremos decir, en absoluto, que sea algo negativo regalar muñecas a las niñas o regalar coches a los niños; simplemente, es muy positivo para el desarrollo de ambos disponer de todas las opciones, sin que se les oriente desde pequeños a un tipo u otro de juguetes. Por ello, lo ideal sería que, tanto a niños como a niñas, les regalásemos juguetes que tradicionalmente se han considerado “de niño” y “de niña”, de forma que puedan elegir libremente qué les gusta.