El síndrome del impostor es un fenómeno psicológico en el que la persona siente que no merece los logros y éxitos conseguidos, dudando de sus habilidades y valía a pesar de tener pruebas que demuestran su competencia. Por este motivo, se vive con un temor constante de ser descubierto como no apto o fraude.
Las personas que lo padecen suelen convivir con un estado de insatisfacción permanente, no disfrutando de las actividades realizadas y con una sensación continua de malestar y culpa.
Los estudios muestran que está vinculado con rasgos de perfeccionismo, el cual puede generar un ciclo de autoexigencia insostenible, donde los éxitos no proporcionan satisfacción debido a la creencia constante de que no son suficientes. ¿Crees que te ocurre o te ha ocurrido algo parecido?
Debes saber que esto puede afectar a personas de todos los niveles de éxito y no está limitado a un ámbito específico, por lo que puede influir en diversas áreas vitales, afectando a la salud mental, la productividad y la satisfacción vital.
Síndrome del impostor: síntomas
Algunas características referentes a esta problemática que te pueden ayudar a identificarlo son:
- Duda: Cuestionamiento de las propias habilidades y logros, normalmente con pensamientos autocríticos.
- Atribución externa del éxito: Los logros se atribuyen a factores externos como suerte o circunstancias no derivadas de las propias acciones.
- Comparaciones: Tendencia a realizar comparaciones con los demás, en las que la persona se considera inferior e insuficiente.
- Baja autoestima: Existe una percepción negativa de uno mismo y una pérdida de confianza al no considerarse válido.
- Ansiedad: Puede existir sensación de tensión, miedo al bajo rendimiento o a no cumplir con las expectativas.
- Expectativas no realistas: Se suelen tener expectativas de rendimiento o logro no realistas, en las que se menosprecian los avances conseguidos y se persigue el cumplimiento de estándares muy altos impuestos interna o externamente.
- Evitar reconocimiento: Existe una resistencia a aceptar halagos, felicitaciones o recompensas debido a la creencia de no ser merecedores.
- Evitación de desafíos: Puede existir un rechazo a nuevos retos al considerar no ser lo suficientemente válido e incluso una tendencia a la procrastinación.
¿Cómo superar el síndrome del impostor?
Es esencial que sepas que el síndrome del impostor es habitual, muy común y puede ser tratado en terapia a través de un proceso de autoreflexión, compromiso y constancia.
El trabajo que se te enseñaría consistiría en cambiar patrones de pensamiento negativos, aprendiendo a identificarlos y desafiarlos para obtener una visión más objetiva y no sesgada.
También será importante que analices objetivamente los logros y éxitos personales, intentando reconocer y valorar tus habilidades y capacidades, desarrollando una autoimagen más positiva.
Asimismo, tendrás que establecer metas realistas para orientar las acciones hacia objetivos alcanzables y fomentar la sensación de satisfacción, aprendiendo a celebrar los logros obtenidos.
Si te has sentido identificado con este fenómeno y sientes que necesitas apoyo para gestionarlo, en Alegra Psicólogos Málaga, Puente Genil y Estepa no dudaremos en ayudarte y proporcionarte las herramientas necesarias para conseguir que te sientas merecedor de todo lo que te propongas y consigas.