Quizás hayas observado cómo en nuestra sociedad hay multitud de perfiles de personas con características muy diferentes. Pero a la vez, estamos seguros de que también has visto patrones de conductas que se repiten en esos grupos humanos. Uno de los más llamativos es el caso de lo que solemos llamar mentiroso compulsivo.
Es habitual que te llegues a preguntar si es una enfermedad de mentiroso compulsivo. La realidad es que dependiendo de diferentes factores sobre cómo, cuándo, con qué frecuencia y por qué mienta la persona, se podrá considerar un problema de salud mental. A continuación, responderemos a las principales preguntas sobre el tema para que sepas todo lo necesario sobre qué es la mitomanía como enfermedad del mentiroso compulsivo.
¿Qué es la mitomanía?
La respuesta sencilla que te podemos dar es que la mitomanía es un tipo de problema mental que implica que la persona que lo sufre miente de manera continuada, a veces por los beneficios que saca de la mentira, y a veces por la adicción que termina desarrollando a mentir, donde pierde el control para dejar de hacerlo.
Para la respuesta ortodoxa, vamos a dejarte la definición oficial de la APA (Asociación de Psicología Americana) que dice que la mitomanía es la “tendencia a elaborar, exagerar y decir mentiras, incluidos relatos de experiencias imaginadas, que a menudo implican autoengaño”.
¿Cuáles son los síntomas de la mitomanía?
En la siguiente lista te vamos a enumerar algunos de los síntomas en un mentiroso compulsivo que sufre mitomanía:
- Pensamientos intrusivos que le empujan a mentir.
- Falta de control para dejar de mentir.
- Sensación de refuerzo/placer si no se descubren las mentiras.
- Baja autoestima.
- Carencias en las habilidades sociales.
- Tendencia a cambiar la realidad, a manipularla.
- Altos niveles de ansiedad como causa y consecuencia del acto de mentir.
Causas de la mitomanía
La enfermedad del mentiroso compulsivo o mitomanía se genera por diferentes motivos. Debes saber que son personas cuyas historias de vida contienen elementos que en cierta forma generan necesidades. Esas necesidades pueden ser cubiertas o enfrentadas de varias formas, pero el mentiroso compulsivo encuentra de manera más o menos azarosa, la mentira como forma de cubrirlas o afrontarlas.
Observarás en estas personas:
- Necesidad de recibir atención y admiración de los demás.
- Necesidad de crear nuevas realidades. Siendo en ocasiones un héroe y en ocasiones la víctima, según le convenga.
- Necesidad de gestionar el estrés o ansiedad, donde la mentira sirve de afrontamiento, paradójicamente mediante la evasión o el escape (es decir, no afrontando).
- Compensar la baja autoestima.
- Compensar la inseguridad patológica.
- Como síntoma de un trastorno mayor, como en ciertos tipos de esquizofrenia o trastorno Bipolar.
- Traumas psicológicos, para los que la mentira resulta un refugio.
- Factores biológicos, donde se aprecian niveles alterados en neurotransmisores.
- Desequilibrios a nivel neurológico, ya que el mentiroso compulsivo presenta en ocasiones un incremento de sustancia blanca.
- Anomalías en el sistema nervioso como la presencia de epilepsia, traumatismo o infecciones.
Tipos de mitomanía
Puede que pienses que existe un solo tipo de mentiroso, pero la verdad es que la investigación nos ha dejado claro que la mitomanía se desarrolla de varias formas. Te presentamos a continuación las principales:
- Mitomanía relacional. Les sirve para crear nuevas relaciones.
- Mitomanía imaginativa. Utilizan la mentira par escapar de la realidad inventando una nueva.
- Mitomanía simuladora. Esta se encuentra más relacionada con la simulación de enfermedades y el rol de víctima.
- Pseudología fantástica. Este tipo de mentira inventa grandes relatos, con detalles increíbles a fin de impresionar.
- Mitomanía compulsiva. No para de mentir, por beneficio personal o solo por el placer de mentir. Es la más adictiva y la que termina generando más falta de control.
- Mitomanía de vanidad. Cuando usan falsos halagos ajenos o propios sobre el tema físico.
- Mitomanía estafadora. La habrás escuchado en alguna noticia cuando aparecen casos de estafas. Aquí el objetivo del mentiroso compulsivo es claramente el beneficio económico.
¿Cómo curar la mitomanía?
El tratamiento para la mitomanía implica, tanto en los casos de mitomanía en adultos, como mitomanía en adolescentes, el uso de la terapia cognitivo-conductual. En algunos casos se recurre también a la ayuda de los fármacos, sobre todo si la persona tiene entre sus principales causas los pensamientos intrusivos y la falta de control sobre su conducta.
Si estás en la posición de querer ayudar a alguien con su mitomanía, usa la compasión. Acompaña a la persona en la comprensión de su problema, sin juzgar su conducta, solo recordándole las consecuencias negativas que está alcanzando su conducta y lo beneficioso que sería un cambio de rumbo.
Pero tanto si eres la persona que acompaña en el proceso de recuperación como si eres quien sufre este problema, es muy importante que te apoyes en profesionales que te guíen y planifiquen el tratamiento, como se hace en Alegra Psicólogos Málaga y Puente Genil, donde profesionales especializados construirán un tratamiento adaptado a tus necesidades, único, específico, que reducirá el malestar por el que hay que pasar en cualquier proceso de cura, y adelantará el tiempo de recuperación.
