Nuestros hijos se enfrentan cada día a uno de los mayores retos de la vida, CRECER. Pero en ese avance, se encuentran con multitud de dificultades. Algunas de ellas son biológicas, como puedan ser cuestiones médicas relacionadas con el organismo. Y otras son más de tipo social, entre las que encontramos de forma específica, las relaciones interpersonales, la educación y el ambiente en general.
No cabe duda de que los padres intentan buscar lo mejor para sus hijos. Pero cuando se tiene uno, no viene con un manual de instrucciones bajo el brazo. Lo cierto es que hay infinidad de cuestiones que los progenitores han de ir aprendiendo. En Alegra psicólogos Málaga, vamos dando pautas para mejorar aquello que esté fallando ó sea susceptible de encontrar un mayor nivel de funcionamiento.
“Si jamás ven a sus padres coger un libro o un periódico para leer…”
Sin ir más lejos, vemos que el ambiente en la infancia y la adolescencia que el niño tenga en casa, resulta fundamental para su desarrollo. Podemos tener a nuestro hijo en el mejor colegio de la ciudad, podemos proporcionarle la mejor tecnología para el estudio, o una casa llena de comodidades. Lo cierto es que hay necesidades más básicas. Si los padres no están a penas en casa, y el niño tiene que pasar la mayor parte de la tarde en casa de los abuelos; si los padres tienen discusiones muy a menudo, y las resuelven a voces; si jamás ven a sus padres coger un libro o un periódico para leer; si los programas que ven en la televisión son de bajo contenido educativo; si no se muestran cariño abiertamente; si el tiempo de atención e interacción con su hijo es muy deficiente….la probabilidad de fracaso en su crecimiento aumenta exponencialmente.
En conclusión, hay que recordar que todo lo que rodea al niño, es decir, el ambiente en la infancia y la adolescencia, puede marcar todo el desarrollo humano, por lo que tenemos que cuidarlo al detalle como el resto de cosas.