Desde que Alegra Centro de Psicología comenzó su andadura sois muchos los que ya sabéis que somos tres los profesionales que os atendemos, hoy en este post, queremos reconocer que en más de una ocasión hemos sido cuatro.
El cuarto socio de Alegra siempre ha tenido mucho interés en estar entre nosotros, pero con el que nunca hemos compaginado y siempre hemos querido que se quedase fuera del proyecto. Ahora estamos comprobando que el mismo individuo está intentando también ser vuestro acompañante en rutina y sin llegar a ser muy criticones queremos advertiros: EL ESTRÉS.
Seamos sinceros, este cuarto individuo no es tan malísimo, tiene sus cosas buenas como todo, además de sacarnos de situaciones de emergencia vital, nos ayuda a mejorar el rendimiento al darnos un plus de atención y de energía en ciertas ocasiones (FASE 1, ESTIMULACIÓN). Pero hasta cierto punto, puesto que a partir de un nivel de estrés no hay ya mejor rendimiento (FASE 2, RESISTENCIA). Y aún peor, si no pongo remedio podemos llegar a mencionar aquella frase de “no sabía lo que podía llegar a hacerme el estrés, hasta que lo hizo” (FASE 3, DESGASTE).
Estos son algunos de los síntomas de aquella persona que sí haya aceptado a este acompañante:
- Digestiones difíciles, intestinos tocados, dolor en la zona lumbar, colesterol alto, trastornos musculo– esqueléticos, afectación del sistema inmune y del aparato reproductor, dormir mal, estar mentalmente enganchado al trabajo o constantemente planificando el futuro.
- Se preocupan demasiado de ellos mismos y pierden la visión de lo que hacen los demás.
- Se empieza a perder la capacidad de decidir por sí mismo/a.
- El estrés hace que la vida se viva como una lucha por sobrevivir. Nos hace que vivamos en tensión, con prisa para todo, sin poder disfrutar de muchos momentos bonitos de la vida.
¿Te identificas con alguno? No eres una mera víctima, tu papel activo frente al estrés es crucial y puedes hacer algo contra esto a partir del momento en qué lo decidas. Valora las situaciones adecuadamente, busca habilidades para afrontarlas y si es necesario, toma medidas en cuanto a tu entorno.
Nosotros teníamos claro que el mejor equipo era el de tres, que el cuarto socio de Alegra debe quedarse fuera. ¿Cuántos compañeros quieres tú?